Guardado en mi memoria.

Cada noche que miro al cielo y veo las estrellas brillando me imagino que pueden ser tus dientes, esos tan resplandecientes que salían cada vez que sonreías. Cada vez que miro a la luna, me imagino si tú también estarás haciéndolo en este mismo instante, si tú también tendrás tus preciosos ojos brillando tras el reflejo de su luminosidad. Cada día miro hacia un lado y ya no está, miro hacia atrás y no te veo siguiéndome por las calles que antes siempre frecuentábamos. Observo mi móvil, tumbada  de lado en el borde derecho de la cama, y ya no aparecen aquellas sonrisas que tú me sonsacabas. Cada roce, cada caricia, cada beso, cada instante queda guardado en mi memoria.